EMPRENDEDORES GENERAN ABONO ORGÁNICO A BASE DE RESÍDUOS

La necesidad económica y el afán de generar una propuesta ambiental llevó a un grupo de personas de cantón Guachapala a emprender un proyecto para convertir los desechos del embalse de Mazar en abono orgánico, que al momento es vendido a la Compañía AgroKawsay la cual se utiliza para el cultivo y la germinación de semillas en los viveros que actualmente posee esta entidad y que sirven a la población azuaya.

Lauro Sigcha, gerente de AgroKawsay de la Prefectura explica que meses atrás el prefecto, Yaku Pérez visitó la zona del embalse ubicado en el cantón Guachapala en donde constató el trabajo por el cuidado ambiental que realizan estas familias y su emprendimiento; por lo tanto, la directriz es apoyar con la compra de estos insumos de manera que estas personas puedan dinamizar su economía.

“La Prefectura por medio de AgroKawsay al momento posee tres viveros que están activos con producción de plántulas de hortalizas, árboles frutales, forestales, ornamentales y más en un promedio de un millón por año; en forma constante compramos abono orgánico y más insumos para esa producción, eso lo hacíamos mediante diferentes empresas privadas; sin embargo ahora lo compramos a este grupo de pequeños emprendedores que requieren nuestro apoyo, porque reconocemos la importancia que tiene su trabajo en el cuidado ambiental”, agrega Sigcha.

“Este emprendimiento inició hace aproximadamente dos años, vimos que el embalse tenía mucha contaminación, pero también una oportunidad por la gran cantidad de madera que los ríos arrastran y que terminan en este sitio, nos organizamos entre 13 personas y emprendimos este proyecto que consiste en separar la madera de la basura, como botellas, plásticos y más que arrastra el embalse y luego de un proceso minucioso se convierte en abono” señala Jaime Pastuzo miembro de la asociación ASOSERMANGUA del cantón Guachapala.

Comenta que la madera se clasifica por tamaños, se pasa por la máquina trituradora desde donde se obtiene el abono orgánico de procedencia vegetal, luego de un tamizado de este abono se consigue también el material denominado turba, que es un insumo básico para la germinación de semillas en los viveros. Los costos varían de acuerdo al abono o material que se obtiene y la finalidad que le dé el consumidor.

“Estamos vendiendo nuestro abono a personas particulares y también a instituciones públicas, el apoyo que en este momento nos brinda la Prefectura y su Compañía AgroKawsay mediante la compra de nuestros insumos es de vital importancia para nosotros, porque este trabajo es muy sacrificado y con los recursos que generamos podemos solventar los gastos de nuestros hogares y seguir adelante con el proyecto”, agrega Pastuzo.

“Para muchas personas trabajar recolectando desechos es malo y denigrante, pero realmente para mí es una labor buena porque vemos que el medio ambiente es el más beneficiado, el embalse se ve limpio, pero también con la platita que generamos desde acá podemos para alimentar a nuestras familias, pedimos a la población que nos apoye y agradecemos al prefecto, Yaku Pérez por el respaldo que nos brinda” señala por su parte Leopoldo Castro, miembro de la asociación.